El viento fue un quebradero de cabeza para el comité de regatas

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Compuestos y sin regata. Así se quedaron las 11 embarcaciones que se dieron cita a la segunda jornada de la liga de barquillos de 5 metros éste sábado en las instalaciones de Marina Colón.

A las 11 de la mañana ya estaban todos preparados para comenzar la regata pero sin embargo habían problemas con el recorrido debido a un viento carente de fuerza y rolón que volvió loco al comité en busca de alguna buena situación de las boyas que permitiera realizar la prueba.

Daban las 12 menos cuarto de la mañana cuando parecía que por fin se podría llevar a cabo la regata. Dos boyas cercana a la costa, otra mucho más alejada hacían intuir un comienzo de prueba inminente, más cuando se retiró la bandera de aplazamiento y se comenzó con la preparación de la regata.

Pero sólo fue un espejismo. En lo que se preparó todo el viento cambió de intensidad y rumbo, obligando a cambiar el campo de regatas. En ese instante comenzó la persecución del comité de regatas al dios Eolo que se movía por el litoral lanzaroteño hacía imposible tener un campo de regatas estable.

Llegadas las 12:20, con los barquillos desesperados por la espera, el comité decide suspender la regata. Apesadumbrados unos, enfadados otros y resignados otros, volvían a tierra las 11 embarcaciones, sin regatear, sin competir y esperando que en la próxima regata estén nuevamente todos, incluso el viento estable.

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