Pedro es el único jugador en las 4 temporadas de EBA del Conejero
LanzaroteDeportiva.com
Pedro Hernández, 'Pedrito' para muchos, no es el jugador con más partidos ni con más minutos con la camiseta del Aloe Plus Lanzarote Conejero en la Liga EBA pero si es el único que ha hecho algo inigualable, jugar en las 4 temporadas que el club naranja ha estado en la categoría nacional.
El pasado fin de semana el Aloe Plus Lanzarote Conejero comenzaba la temporada 19/20 en la Liga EBA y con ello su cuarta temporada en la categoría. Iñaki Merino, técnico del equipo lanzaroteño, daba entrada a Pedro Hernández, disputando cerca de 25 minutos, teniendo una valoración final de 11 puntos.
La entrada de 'Pedrito' en la cancha sirvió para refrendar más la cantera lanzaroteña, con el único jugador en la historia del club que ha jugado en cada una de las temporadas que ha estado el equipo en EBA. Es más, fue pieza fundamental en el año del ascenso a la categoría, disputando la fase final en Gran Canaria con jugadores como Cándido Matoso, Fran Suárez o Cécimo Armas, entre otros.
En la temporada 16/17, debut del Aloe Plus Lanzarote Conejero en la Liga EBA, Pedro disputó un total de 13 partidos, consiguiendo 41 puntos, 20 rebotes y 35 puntos de valoración. En la siguiente, la 17/18, disputó un encuentro menos, 12, pero obtuvo similares números en anotación (43) y en valoración (34), incrementando la cantidad de rebotes (54). La temporada pasada el jugador jugó en el CB Maramajo como jugador vinculado, contando en dos ocasiones por Federico Toledo para el equipo naranja, anotando un punto y capturando 2 rebotes.
Pedro Hernández en su etapa minibasket con el Conejero
Ahora, ya de nuevo en el equipo donde se crió desde que tenía 6 años pasando por todas las categorías, menos en la preinfantil e infantil que estuvo en el Magec Tías regresando en la campaña 12/13, amenaza con demostrar su calidad, como hizo contra el Distrito Olímpico el pasado fin de semana.
Así lo ven sus entrenadores en Liga EBA
Iván Fernández (16/17): “Pedro es un chico con un corazón tremendo, eso para mi es lo que le caracteriza, más allá del talento innato que atesora para jugar al baloncesto. Epítome de jugador del CB Conejero, del barrio de Valterra, aunque a él le guste decir que él es del Lomo. Siempre le ha caracterizado su gran corazón y su capacidad de pelear por lo que le importa. Ese es un arma de doble filo que a veces le ha pasado factura. Personalmente creo que comienza a disfrutar del baloncesto ahora que ha aprendido a aceptar la derrota como una parte más del juego. Siempre luchador, siempre entregado, siempre corazón.
Como jugador, tiene una capacidad innata para leer los espacios y entender los momentos del partido. Es consciente a su corta edad de sus limitaciones y sabe esconder sus carencias, apoyándose en sus compañeros para conseguir que el rendimiento del equipo sea el mejor posible.
Es de esos jugadores que estando en la cancha con un compañero que no ha tenido oportunidad de tirar en todo el partido, busca la mejor situación posible para que su compañero pueda tirar y no se vaya a casa de vacío.”
Samuel Sosa (17/18): "Pedro es un jugador joven, muy competitivo y con talento ganador, con mucha energía, jugador que todavía puede crecer a nivel baloncestistico. Buena persona y amigo."
Federico Toledo (18/19): "Pedrito es un niño encantador, buena persona, enamorado del baloncesto, competidor como nadie y talento puro, de él lo mejor que se puede decir: es que al caminar va derrochando talento. Es un crack, alguien con quien me iría al fin del mundo y jamas me aburriría.
En un equipo de baloncesto en el que se sienta importante y que se cuenta con él, es el mejor del mundo, un jugador que tiene mucho carisma y que hace grupo, un tipo sensacional. Un fenómeno"
Iñaki Merino (19/20): “Pedro es un jugador con mucho talento, jugador valiente y con mucho descaro. Le gusta el juego vertical, y es capaz de hacerlo con acierto, ya que es un jugador bastante eléctrico y decidido. Esto le provoca en ocasiones ser capaz de lo mejor (y hacer jugadas al alcance de pocos) y de lo peor (y perder el control del juego).
Tiene un manejo de balón, y visión del juego privilegiados. Trabaja bien para progresar en sus capacidades, y de la mejora de sus déficits técnicos, y condición física, podría venirle un salto aún mayor en su juego.
Además es un jugador muy competitivo, que cada vez que está en la pista se exige el máximo a si mismo y a los compañeros. Puede ser inestable emocionalmente cuando los de alrededor no se exigen tanto como él, ya que él siempre está dispuesto a ayudar, y escuchar al entrenador.
Por el momento ha encontrado un equilibrio emocional, una confianza, y una complicidad, que creo que le van a permitir brillar durante la temporada.”